martes, 3 de mayo de 2011

Pakistán niega haber escondido a Bin Laden en su territorio

Por Mark Hosenball y Kamran Haider
WASHINGTON/ABBOTTABAD, Pakistán (Reuters) - El presidente de Pakistán negó el martes las suposiciones de que su Gobierno podría haber encubierto a Osama bin Laden, pero reconoció que sus fuerzas de seguridad fueron excluidas de una operación estadounidense que mató al líder de Al Qaeda.
Funcionarios estadounidenses no mantuvieron al tanto a las autoridades pakistaníes por preocupación de que pudieran "alertar a los objetivos" y poner en peligro el asalto realizado el lunes por las fuerzas especiales que acabó con la larga persecución de bin Laden, relató el director de la CIA Leon Panetta a la revista Time.
La revelación de que bin Laden vivía en un lujoso complejo en la ciudad de Abbottabad, posiblemente durante cinco o seis años, llevó a muchos legisladores estadounidenses a exigir una revisión de los miles de millones de dólares en ayuda que Washington entrega a Pakistán, un país con armas nucleares.
El presidente pakistaní Asif Ali Zardari, dando una primera respuesta a las preguntas sobre cómo el militante más buscado del mundo pudo vivir cómodamente y pasando desapercibido cerca de Islamabad hizo poco por disipar las sospechas.
"Algunos en la prensa estadounidense han sugerido la falta de vitalidad en la lucha contra el terrorismo, o peor, que fuimos poco honrados y en realidad protegimos a los terroristas que decíamos que estábamos buscando", escribió Zardari en un artículo de opinión en el Washington Post.
"Tales especulaciones infundadas pueden originar noticias emocionantes, pero no reflejan los hechos", remarcó.
Las declaraciones de Zardari fueron el primer comentario público de un líder pakistaní sobre la incursión de un equipo de asalto estadounidense contra el complejo de bin Laden que puso fin a la larga persecución del líder de Al Qaeda, quien se había convertido en la cara de la militancia islámica.
Pakistán ha enfrentado un enorme escrutinio internacional desde que bin Laden murió, con preguntas sobre si su Ejército y agencias de inteligencia fueron demasiado incompetentes para atraparlo o si siempre supieron dónde se estaba escondiendo e incluso si eran cómplices.
En un reflejo de las tensas relaciones entre Washington y Pakistán por años de desconfianza, Islamabad no estuvo al tanto del asalto hasta que todas las aeronaves estadounidenses estuvieron fuera del espacio aéreo pakistaní.
Al mismo tiempo, el operativo contra bin Laden -que se convirtió en la personificación del mal para muchos estadounidenses como el arquitecto de los ataques del 2001 en Nueva York y Washington- dio un impulso a la popularidad del presidente Barack Obama.
En Estados Unidos, la posición de Obama ha sido erosionada por los problemas económicos y los altos precios de la gasolina.
En un sondeo online de Reuters/Ipsos, el 39 por ciento de los estadounidenses respondió que su valoración sobre el liderazgo del presidente había mejorado y el 42 por ciento afirmó que ahora tenía una mejor opinión de su manejo de la guerra contra el terrorismo.
Pero, a raíz de los últimos eventos, Obama podría enfrentar más presión para acelerar el plan de retirar algunas tropas estadounidenses de la impopular guerra en Afganistán en julio.
PAKISTAN EXPRESA "GRAVES PREOCUPACIONES"
Pakistán negó el martes ningún conocimiento previo del asalto estadounidense que mató a bin Laden, pero dijo que había estado compartiendo información sobre el complejo objetivo con la CIA desde 2009.
Mientras Islamabad describía la muerte de bin Laden como un importante hito en la lucha contra el terrorismo, el ministro de Exteriores pakistaní dijo que expresaba "graves preocupaciones" porque la operación se había llevado a cabo sin informar por adelantado.
"El no estaba en un lugar donde habríamos anticipado que estaría, pero ahora ha desaparecido", escribió el presidente Zardari sin ofrecer mayor defensa contra las acusaciones de que sus servicios de seguridad deberían haber sabido donde se ocultaba bin Laden.
"Aunque los eventos del domingo no fueron una operación conjunta, una década de cooperación y sociedad entre Estados Unidos y Pakistán condujeron a la eliminación de Osama bin Laden como una amenaza continua para el mundo civilizado", agregó.
Enfrentado a la presión de mostrar una confirmación absoluta de la muerte de bin Laden, el principal asesor antiterrorista de la Casa Blanca John Brennan dijo que Estados Unidos estaba considerando publicar fotografías y un vídeo tomados durante el asalto como prueba de que el líder de Al Qaeda murió en la incursión.
Los talibanes afganos cuestionaron el martes la veracidad de la muerte de bin Laden, diciendo que Washington no había proporcionado "ninguna evidencia aceptable para respaldar su afirmación" de que está muerto. También dijeron que los asesores de bin Laden no habían confirmado ni negado su muerte.
Otro funcionario estadounidense indicó que las fotos del sepelio de bin Laden en el mar podrían ser divulgadas el martes, pero aún no se tomó ninguna decisión. Washington también está analizando publicar una foto de su cuerpo.
En tanto, el primer ministro británico, David Cameron, dijo a la radio de la BBC que su país seguirá trabajando con Pakistán para combatir la militancia, pero insistió en que bin Laden "tuvo que haber tenido una red de apoyo en ese país y que Islamabad debe responder preguntas sobre el tema.
El fiscal general de Estados Unidos, Eric Holder, instó a las autoridades a "tener en cuenta que la muerte de Bin Laden puede provocar actos en represalia en Estados Unidos o contra nuestros intereses en el exterior".
(Editado en Español por Carlos Aliaga, Lucila Sigal y Juana Casas)

No hay comentarios: