Arrancó lento, como dicen en el mercado, el blanqueo de capitales que impulsa el Gobierno. Era obvio. Nadie (o casi nadie) ingresa al principio y el wait-andsee es algo usual. En el Ejecutivo no muestran, aún, preocupación. Rogelio Frigerio y Alfonso Prat- Gay destacan que la meta oficial se mantiene (los famosos US$ 20.000 millones) y aclaran que, si bien por ahora hay muchas consultas, hasta marzo no se sabrá el resultado final de la medida. Claro que intensificaron el cepo informativo (por el secreto fiscal, en realidad) y eso hace que el goteo a la prensa sea mínimo (y poco chequeable). Pero según lo que trascendió, no habría demasiado para festejar (por ahora).
En el Gobierno dicen que las fechas claves para ver cómo va la medida son el 30 de septiembre, el 31 de octubre, el 31 de diciembre y el 31 de marzo. En esos cortes se verá, según los casos, qué tan lejos o tan cerca está de la meta oficial. Por las dudas, oficialmente se habló de una meta baja en relación a lo que espera el resto del mercado (entre US$ 50.000 millones y US$ 80.000 millones), con lo cual las chances de tener un mal resultado son muy bajas.
Las señales
De todas formas, si hay algo que intranquiliza al Gobierno, además de cuánto se recaude fiscalmente por la medida, es “la señal que se dará hacia el exterior”. En boca un funcionario de alto rango del ministerio de Hacienda y Finanzas Públicas: “No podemos ir a pedirle plata al mundo cuando los mismos argentinos no quieren repatriar sus capitales”. Si bien aclara que “somos optimistas” con el resultado, admite que “afuera están esperando ver cómo nos va”.
Para otro Gobierno, que el blanqueo esté o no por sobre las expectativas del mercado sería algo no tan relevante si cumple con la meta (siempre modesta) oficial. Pero para Cambiemos, que cree a ultranza en las expectativas y las bondades de las inversiones extranjeras y cómo llegar a tentarlas, un número no tan abrumador podría ser leído como una derrota. El Ejecutivo se esmera, quizás en exceso, en demostrar que hay apetito por invertir en Argentina. Haber publicado en la página de Hacienda a cuánto ascienden las promesas de inversión es un síntoma de eso.
Se viene el Foro Parte de ese apuro oficial en mostrar resultados se verá la semana que viene en el Foro de Inversiones que se realizará en el Centro Cultural Kirchner (CCK). Organizado por la Agencia Argentina de Inversiones y Comercio Internacional, el foro presentará durante tres días, sesiones plenarias, conferencias temáticas y reuniones bilaterales. Casi todos los funcionares, desde el mismísimo Mauricio Macri en adelante, estarán presentes. Se confirmó que vendrán los números uno de las empresas más grandes del mundo a ver qué le ofrece la Argentina. “Viene todo el mundo”, cuentan.
Algunos dudan si habrá sido el mejor timing hacer este mega foro justo cuando faltan que se consoliden “buenas noticias” como la baja de la inflación, un repunte de la economía o que el blanqueo fue exitoso. Un hombre del Gobierno admitía por lo bajo que “seguro que si esto lo hacíamos el año que viene tenés mejores resultados para mostrar”, pero que “la tendencia en lo económico ya es clara y las empresas invierten hoy por varios años hacia adelante”. “El momento de empezar con los inversiones es ahora”, señaló.
Tanto en el blanqueo, como en el megaforo, el Gobierno se juega credibilidad. En un caso, que los argentinos “confíen” en la administración macrista y traigan sus capitales a un país que, década tras década, los defraudó. Y el temor del foro, que se fogonea como un evento único, es que poco de todo eso se traslade a inversiones palpables para la economía.
En el Gobierno dicen que las fechas claves para ver cómo va la medida son el 30 de septiembre, el 31 de octubre, el 31 de diciembre y el 31 de marzo. En esos cortes se verá, según los casos, qué tan lejos o tan cerca está de la meta oficial. Por las dudas, oficialmente se habló de una meta baja en relación a lo que espera el resto del mercado (entre US$ 50.000 millones y US$ 80.000 millones), con lo cual las chances de tener un mal resultado son muy bajas.
Las señales
De todas formas, si hay algo que intranquiliza al Gobierno, además de cuánto se recaude fiscalmente por la medida, es “la señal que se dará hacia el exterior”. En boca un funcionario de alto rango del ministerio de Hacienda y Finanzas Públicas: “No podemos ir a pedirle plata al mundo cuando los mismos argentinos no quieren repatriar sus capitales”. Si bien aclara que “somos optimistas” con el resultado, admite que “afuera están esperando ver cómo nos va”.
Para otro Gobierno, que el blanqueo esté o no por sobre las expectativas del mercado sería algo no tan relevante si cumple con la meta (siempre modesta) oficial. Pero para Cambiemos, que cree a ultranza en las expectativas y las bondades de las inversiones extranjeras y cómo llegar a tentarlas, un número no tan abrumador podría ser leído como una derrota. El Ejecutivo se esmera, quizás en exceso, en demostrar que hay apetito por invertir en Argentina. Haber publicado en la página de Hacienda a cuánto ascienden las promesas de inversión es un síntoma de eso.
Se viene el Foro Parte de ese apuro oficial en mostrar resultados se verá la semana que viene en el Foro de Inversiones que se realizará en el Centro Cultural Kirchner (CCK). Organizado por la Agencia Argentina de Inversiones y Comercio Internacional, el foro presentará durante tres días, sesiones plenarias, conferencias temáticas y reuniones bilaterales. Casi todos los funcionares, desde el mismísimo Mauricio Macri en adelante, estarán presentes. Se confirmó que vendrán los números uno de las empresas más grandes del mundo a ver qué le ofrece la Argentina. “Viene todo el mundo”, cuentan.
Algunos dudan si habrá sido el mejor timing hacer este mega foro justo cuando faltan que se consoliden “buenas noticias” como la baja de la inflación, un repunte de la economía o que el blanqueo fue exitoso. Un hombre del Gobierno admitía por lo bajo que “seguro que si esto lo hacíamos el año que viene tenés mejores resultados para mostrar”, pero que “la tendencia en lo económico ya es clara y las empresas invierten hoy por varios años hacia adelante”. “El momento de empezar con los inversiones es ahora”, señaló.
Tanto en el blanqueo, como en el megaforo, el Gobierno se juega credibilidad. En un caso, que los argentinos “confíen” en la administración macrista y traigan sus capitales a un país que, década tras década, los defraudó. Y el temor del foro, que se fogonea como un evento único, es que poco de todo eso se traslade a inversiones palpables para la economía.
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