Antes de que sea tarde
Los abajo firmantes destacamos la importancia de reducir drásticamente el astronómico gasto público eliminando funciones incompatibles con un sistema republicano. Esto a los efectos de liberar recursos a los bolsillos de la gente, hoy ahogada por la financiación de una carga impositiva imposible de sostener y que principalmente obliga a los más necesitados a reducir el fruto de su trabajo. Es de desear que esta situación alarmante de un peligroso campo minado no se pretenda financiar con deuda pública para disimular los estragos de un sistema estatista hasta la médula, lo cual, en definitiva, conducirá a otra crisis de la deuda como las que hemos padecido en el pasado.
Estas reflexiones telegráficas apuntan a ayudar al actual gobierno y para que algunos distraídos no caigan en el grueso error de sostener que fracasó "el neoliberalismo", una etiqueta sin contenido y que ningún intelectual serio acepta como propia en ninguna parte del mundo. En todo caso, liberales preocupados y ocupados porque en nuestro país alguna vez se comience a retomar la tradición alberdiana.
Alberto Benegas Lynch (h.)
Roberto Cachanosky
José Luis Espert
Agustín Etchebarne
Agustín Monteverde
(La Nación, mayo 20 de 2016)
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