5/5/2012 - Las lluvias de abril fueron escasas en la zona núcleo. Se recuperó el norte del país. |
 |
EL CENTRO ESTE LO MAS SECO
Las primeras jornadas del mes de abril dejaron las lluvias más importantes de este período en zonas del centro este, luego las precipitaciones se concentraron en áreas del norte del país, SL, oeste de CB, norte de LP y las vecindades del noroeste de BA. El centro sur de ER, buena parte del centro sur de SF y el nor noreste de BA, es decir el centro este de la zona núcleo, tuvieron acumulados pluviales bajos que, si bien no condicionan el inicio de la fina, demandan un pronto regreso de las precipitaciones. El NEA tuvo una oferta de agua favorable que aunque no logra recuperar completamente las deficiencias que se arrastran del cuatrimestre previo, instala un panorama más aliviado para la zona.

FIGURA 1

FIGURA 2
Con excepción de la zona de influencia de la localidad de El Trébol (SF), donde a principios del mes pasado hubo un diferencial pluvial, gran parte de la zona núcleo, acumuló lluvias inferiores a los 40 milímetros. A pesar de estos magros registros no fueron pocas las jornadas donde los niveles de humedad fueron elevados, en muchos casos acompañados por lloviznas que no alcanzaban a dejar marca. De todos modos el mes de abril permitió avanzar con rapidez en las tareas de cosecha. Sobre gran parte del NEA y el noreste de SF las lluvias acumuladas superaron los 130 milímetros, disminuyendo hacia zonas mediterráneas donde igualmente abril comienza a mostrar el retiro de la temporada de lluvia. En este sentido puede decirse que las precipitaciones que se observaron al desplazarnos hacia el NOA fueron satisfactorias y también permiten recuperar en parte las falencias que, por sectores, dejó el verano.
La comparación de las precipitaciones observadas en abril con respecto a los valores estadísticos (1973-2011), facilita la interpretación de la oferta de agua del mes pasado. Sobre la franja central del país se observa un claro comportamiento antagónico entre el este y el oeste. Las anomalías positivas quedaron recostadas sobre zonas mediterráneas, mientras que los desvíos negativos se ubicaron en el este. Debemos notar que ya durante abril la oferta de agua del oeste es inferior a la del este y por lo tanto, sobre el oeste, una anomalía positiva no significa un exceso pluvial que pueda haber causado problemas. Por el contrario las lluvias que califican como abundantes en SL o las vecindades del sudoeste de CB y norte de LP, fueron muy bienvenidas. Más en general una extendida franja que desciende desde el NOA, se despliega hasta el norte de LP, configurando un vasto sector donde la oferta de agua superó los valores normales. Sobre gran parte del este de la región pampeana, exceptuando zonas reducidas de BA, las lluvias no lograron alcanzar los valores medios del mes.
Las temperaturas del mes de abril fueron benignas hasta la semana que comenzó el domingo 22. Por entonces empezó a notarse la influencia de una masa de aire polar que avanzó hasta el norte del país y que se sostuvo con una progresiva moderación en el rigor de las marcas térmicas hasta finales de mes. A lo largo de esta última semana se ha venido observando un cambio de ambiente muy significativo y las temperaturas se han volcado, alcanzándose registros propios de finales de verano, inusuales para comienzos de mayo. Dentro de este contexto las temperaturas máximas de abril no mostraron desvíos significativos, posiblemente los primeros 20 días del mes hayan disimulado la irrupción de aire polar que en algunas jornadas dejó máximas típicas de invierno. Por su parte, las temperaturas mínimas si tendieron a resumiese con desvíos negativos, pero claramente los enfriamientos más pronunciados y sostenidos se ubicaron al sur del Salado bonaerense, donde por otra parte se concretaron las heladas más intensas cuando se observó la semana dominada por el aire de origen polar.
De alguna manera esta alternancia ambiental que se produjo en los últimos quince días no se aleja demasiado del reacomodamiento de masas de aire que se observa en esta época del año. Posiblemente hubiese resultado más natural que el actual período cálido acompañe el cierre de abril y que la pasada irrupción de aire polar se concrete en este comienzo de mayo. Sin embargo, esto es razonable asignarlo a la típica variabilidad de circulación que se concreta en la transición estacional, fundamentalmente a medida que comienza enfriarse el continente. Por lo pronto las altas temperaturas se mantendrán hasta mediados de la semana próxima y luego se recompondrían las temperaturas otoñales.
En estas primeras jornadas del mes de mayo, las lluvias solo se presentaron en áreas de los antes patagónicos, observándose buen tiempo en el resto del país. Una intensa circulación del norte ha caracterizado el comienzo de mayo y puede aportar humedad para que regresen las lluvias hacia mediados de la semana próxima.
CLASIFICACIÓN DE LAS RESERVAS
Como es habitual, se analizan las condiciones de humedad actuales mediante la comparación con los valores de reservas normales para la fecha. Los resultados de la comparación se clasifican en categorías, teniendo en cuenta para la estadística la serie de datos1973-2010. El análisis se realiza teniendo en cuenta como cobertura una pastura de consumo permanente a lo largo de todo el año.

FIGURA 3
La clasificación de humedad se ha modificado ostensiblemente en la región pampeana respecto de lo que se observaba a principios de abril. En general se observa un deterioro del nivel de reservas, más marcado en ER y en algunos sectores de SF. Contrariamente el sudeste de SL el sur de CB y buena parte del norte de LP y noroeste de BA, presentan reservas que clasifican como normales.
Es importante notar que las zonas del este que actualmente clasifican con reservas muy por debajo de lo normal, no están en sequía. La disponibilidad de humedad no es la óptima y estos sectores deberían contar con mejor nivel de reserva. Sin embargo cuidando la humedad que se ha mantenido en los lotes cosechados, con algunas lluvias en la segunda década de mayo, la situación puede evolucionar favorablemente. Las primeras respuestas en este sentido pueden llegar a partir del miércoles próximo.
La situación para la misma fecha del año pasado era más holgada. Es decir, este comienzo de mayo encuentra a la zona núcleo en una situación más ajustada respecto del mes pasado y también respecto del año pasado. Por entonces, la situación dominante mostraba mayor extensión de las zonas que clasificaban sus reservas como normales, incluso se destacaban zonas con una disponibilidad de humedad superior a la normal. Esta mejor condición hídrica no fue determinante a la hora de aumentar el área triguera. Este año, todo parece indicar que esta superficie sufrirá una retracción, quedando por debajo del 50 por ciento del área potencialmente apta para el desarrollo de este cultivo, unas tres millones de hectáreas. La salida a la primavera deberá ser climáticamente favorable para concretar buenos rindes y mantener la disponibilidad de este grano.

FIGURA 4
TENDENCIAS CLIMÁTICAS
Indicadores de Escala GlobalEl episodio frío (La Niña) que se sostuvo durante buena parte del último semestre cálido se haya neutralizado. Ya desde finales de febrero las anomalías frías del Pacífico central mostraban un claro retroceso que permitía anticipar la validación de las previsiones de neutralidad para esta época del año. Por otra parte, es claro que desde mediados de enero y aún bajo presencia de La Niña, el patrón pluvial dio un vuelco favorable y salvó, en parte, la producción sojera de Sudamérica. Algunas áreas, como el NEA, el centro norte de la Mesopotamia, parte del sur de Brasil y centro sur de Paraguay, debieron sufrir con mayor persistencia la sequía iniciada en diciembre y solo recientemente obtuvieron una recomposición en la oferta de agua. En resumen y como se aprecia en el mapa, el Pacífico central reporta temperaturas cuyos promedios no generan anomalías de importancia. Aparecen sectores cálidos y otros fríos, pero no definen, por lo pronto, un patrón conducente en uno u otro sentido. La neutralidad está instalada y difícilmente se modifique a lo largo del invierno.

FIGURA 5
Sobre las costas de Perú y desde allí hacia el ecuador, se presenta un calentamiento que puede considerarse una señal respecto de lo que pueda suceder en el inicio del semestre cálido. Habrá que ir monitoreando a lo largo del invierno cómo evoluciona esta anomalía positiva de la temperatura superficial del mar. La misma podría concentrarse en la zona, eventualmente diluirse o en el caso más favorable extenderse hacia la zona central del Pacífico, concretando la aparición de un evento Niño. Este sería el escenario más favorable para el inicio de la primavera para el sudeste de Sudamérica.
Si bien algunos modelos de TSM (temperatura superficial del mar) marcan una tendencia hacia un evento cálido, teniendo en cuenta que a esta parte del año se transita por el nivel más bajo en la precisión de este tipo de pronóstico, preferimos ser conservadores en cuanto a instalar en forma definitiva la aparición de El Niño para comienzos de primavera. Por otra parte debe quedar claro, que si bien el estado actual de neutralidad es el que tiene mayor probabilidad de lograr continuidad, de las dos opciones restantes, es más probable que sobrevenga un evento Niño. Este escenario es sin duda benéfico para las cosechas del sudeste de Sudamérica, ya que por lo general la disponibilidad hídrica no es una limitante. En todo caso los problemas que aparecen son los relacionados con los excesos hídricos.
Es interesante plantear la posibilidad de que la próxima campaña transcurra bajo la señal de El Niño, sin embargo también es razonable esperar a principios de agosto para tener un patrón más definido. En las últimas temporadas los pronósticos vistos desde esa fecha para discriminar Niño /Niña, no han fallado.
El Atlántico no muestra anomalías destacadas. Es decir los vientos con componente este sudeste que aportan aire frío y húmedo no estarían en condiciones de establecer condiciones con temperaturas rigurosas para esta última parte del otoño y el comienzo del invierno. Las irrupciones de aire de origen polar son más esporádicas y aun con los mares del sur sin anomalías negativas destacadas, pueden generar olas de frío de impacto generalizado en gran parte del país.
Indicadores de Escala RegionalCon el continente entrando en su etapa de mayor enfriamiento comienza definirse la típica distribución de precipitaciones del trimestre frío. Es decir, las lluvias comienzan a retirarse hacia el este, quedando para el oeste algunas lluvias que permiten sostener las reservas superficiales.
De esta manera ha quedado casi determinado el escenario hídrico para la fina. Las zonas mediterráneas que no han logrado niveles razonables de humedad en el perfil, afrontarán un riesgo importante al encarar las siembras de la fina. Si bien es posible que el mes de mayo deje algunas precipitaciones, es poco probable que el trimestre frío sea un buen abastecedor para zonas que hayan quedado secas en el oeste del país. La situación parece ser buena para el sur de CB, norte de LP y noroeste de BA. Para la zona núcleo el panorama es más ajustado, pero de acuerdo a lo antedicho sobre las precipitaciones, es también más probable que lleguen precipitaciones para ER, SF y el noreste de BA.
El sudeste de BA cuenta con mayor margen de tiempo y en general es muy poco probable que no cuente con la humedad necesaria para la siembra de la fina. El panorama para el sudoeste de esta provincia es más complejo y sería muy oportuno que se concreten acumulados del orden de los 50 milímetros en lo que resta del mes en esta zona. Queda claro que a medida que avanzamos hacia el invierno esta demanda es más difícil de satisfacer.
La irrupción de aire polar de finales de abril, aumenta la probabilidad de repetirse a medida que nos adentramos en el mes de mayo. Sin embargo la configuración de los sistemas de presión que definen estas situaciones no es demasiado frecuente. Por lo pronto el mayor rigor térmico quedará restringido a la Patagonia y eventualmente avanzará sobre el sur de la región pampeana. Posiblemente mayo sean un mes benigno en cuanto a temperaturas para el centro norte del país.
CONCLUSIONES
De acuerdo al diagnóstico climático del último período y al análisis de los principales indicadores de escala global y regional, proyectamos el siguiente comportamiento pluvial y térmico para el próximo bimestre:
1. El Pacífico Ecuatorial central, presenta condiciones neutrales. Este patrón no se modificará durante el invierno. Se insinúa la posibilidad de aparición de un evento Niño para el semestre cálido.
2. No aparecen forzantes de escala regional que permitan adelantar un apartamiento de la condición normal en la distribución de precipitaciones. Dentro de este contexto, es normal que la franja este del país reciba mejores precipitaciones que las áreas mediterráneas. Eventualmente, es más probable que se den anomalías negativas (lluvias inferiores a las normales) en el este que positivas (lluvias superiores a las normales) en el oeste.
3. Entendemos que las condiciones hídricas actuales no presentarían modificaciones sustanciales en la franja mediterránea del país, más allá de la destacada demanda que presentan algunos sectores como el sudoeste de BA. Sobre zonas con reservas apocadas de ER, SF y noreste de BA, es razonable esperar una recomposición. Actualmente solo en el sudoeste de BA aparecen sectores con reservas que califican como sequía.
4. Si bien sobre el norte del país abril propuso una mejora en el patrón pluvial, la situación hídrica sigue siendo de cuidado, más en esta época del año. Cualquier estrategia para la fina requiere una medición efectiva de la humedad del perfil.
5. Las características térmicas del mes de mayo y posiblemente las del mes de junio, no se verían marcadas por condiciones rigurosas. Si bien es probable que se concreten otras irrupciones de aire polar, las mismas pueden durar a lo sumo una semana, predominando en el resto del período temperaturas cercanas a las normales para la época. Las actuales condiciones térmicas son inusuales para el mes de mayo y se modificarán a partir de mediados de la próxima semana. |
|  |
No hay comentarios:
Publicar un comentario