MADRID/EL ESCORIAL (Reuters) - El Papa Benedicto XVI pidió el viernes a los jóvenes que prestaran atención al sufrimiento humano, durante un vía crucis en el centro de Madrid, que puso el broche al segundo día de visita pastoral a España por la Jornada Mundial de la Juventud.
"Vosotros que sois muy sensibles a la idea de compartir la vida con los demás no paséis de largo ante el sufrimiento humano, donde Dios os espera para que entreguéis lo mejor de vosotros mismos vuestra capacidad de amar y compadecer", dijo el Papa a la multitud congregada en la plaza de Cibeles.
En medio del silencio, jóvenes de diferentes países y grupos sociales - entre ellos desempleados y algunos que sufren persecución por sus creencias - se turnaron para trasladar la cruz por las distintas estaciones situadas en el paseo de Recoletos.
Reviviendo el camino de Cristo hacia la crucifixión, 15 pasos de 12 ciudades y algunas de las tallas de Semana Santa de mayor valor religioso y artístico de España estuvieron presentes en el recorrido. Después una procesión recorre las calles de Madrid.
"Es un orgullo poder pasear a mi Cristo delante del Papa y además poder disfrutar de la JMJ. Es una forma de que millones de personas vean nuestra forma de entender el cristianismo", dijo a Reuters Juan Carrillo, 18 años, costalero del paso Jesús despojado de sus vestiduras, de Granada.
Por primera vez se pueden contemplar fuera de sus lugares de origen - y en otra época distinta a la Semana Santa - estas esculturas de incalculable valor.
"Es un esfuerzo pero merece la pena realizarlo para conocer de cerca la JMJ y sacar al Cristo por las calles de Madrid, agregó David Azuaga, un malagueño de 26 años, hombre de trono del Cristo de la Buena Muerte.
EDUCACIÓN PARA LA FE
El segundo día de la visita del Papa a España con ocasión de la XXVI Jornada Mundial de la Juventud comenzó con un encuentro con 1.600 monjas jóvenes, principalmente de congregaciones españolas, de las cuales 400 viven en conventos de clausura y que abarrotaron el patio de los Reyes del monasterio de San Lorenzo de El Escorial cantando himnos y dando la bienvenida al Papa bajo un sol de justicia.
Después, durante un acto con profesores universitarios en el histórico monasterio, el Papa advirtió de un enfoque utilitarista de la educación, lo que en su opinión conduce a una "ciencia sin límites" y al "totalitarismo político".
"A veces se piensa que la misión de un profesor universitario sea hoy exclusivamente la de formar profesionales competentes y eficaces que satisfagan la demanda laboral en cada preciso momento", dijo en un discurso en el interior de la basílica.
"Ciertamente cunde en la actualidad esa visión utilitarista de la educación, también la universitaria, difundida especialmente dese ámbitos extrauniversitarias", dijo Benedicto XVI a los 1.500 profesores de universidades católicas de todo el planeta.
"Sabemos que cuando la sola utilidad y el pragmatismo inmediato se erigen como criterio principal, las pérdidas pueden ser dramáticas, desde los abusos de una ciencia sin límites más allá de ella misma, hasta el totalitarismo político que se aviva fácilmente cuando se elimina toda referencia superior al mero cálculo de poder", añadió.
Antes de partir hacia El Escorial, Benedicto XVI hizo una visita de cortesía a la familia real en el Palacio de la Zarzuela, y por la tarde mantuvo un encuentro con el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero.
El Papa y Zapatero abordaron temas de la actualidad económica internacional, la hambruna en el norte de África y las relaciones bilaterales entre ambos estados.
La primavera árabe, el reciente atentado en Noruega, fueron otros de los asuntos que repasaron en el encuentro.
"Ambos han coincidido en su preocupación por el ascenso de una ideología xenófoba que atenta contra los valores de libertad religiosa y convivencia característicos de la sociedad europea", dijo el comunicado de La Moncloa.
Madrid ha quedado bloqueado ante la visita pastoral, con cortes de tráfico y un despliegue policial de 10.000 agentes, que incluirá más de 300 actividades culturales y religiosas y una docena de encuentros con el Papa para los cientos de miles de peregrinos que se han dado cita en la capital española.
Bajo el lema "Arraigados y edificados en Cristo. Firmes en la fe", la Jornada Mundial de la Juventud se prolongará hasta el domingo, cuando culminará con una misa en Cuatro Vientos a la que se espera que acudan entre un millón y dos millones de personas.
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