En este número:
1. Editorial: Creatividad para difundir la lectura 2. Recomendados del mes + e-book de regalo: Aforismos y sentencias, de Hipócrates 3. Efemérides: Hiperbreves de Augusto Monterroso 4. Direcciones 5. Suscripciones ¿Hasta dónde puede llegar la creatividad humana, puesta a imaginar formas de difundir ideas o prácticas valiosas? Probablemente, no haya límite para lo que nuestra mente puede pergeñar si cuenta con libertad para pensar por fuera de lo conocido... Aquí, algunas muestras: acciones que organismos privados o públicos llevaron a cabo para fomentar la lectura en los últimos tiempos.
Hace algunos años, se implementó la publicación de textos breves en los subterráneos de Madrid: en los mismos coches, en las paredes, como afiches. Para leer de parado o sentado durante el viaje. Y engancharse luego con el autor o el género si la lectura nos atrapaba y queríamos ya seguirla fuera del vagón.
En Buenos Aires, el Ministerio de Educación avanzó a una instancia más novedosa: repartió durante tres temporadas cuentos de fútbol a los "hinchas" que iban a la cancha. La idea era que contaran con material de lectura para entretenerse en los tiempos muertos: la espera por el comienzo del partido o el entretiempo.
En El Cairo, una cadena de librerías, la Alef Bookstore, puso desde el año pasado la práctica sobre ruedas: surtió de un pequeño lote de libros a decenas de taxis. ¿A quién se destinan los títulos? A los pasajeros que prefieran aprovechar su viaje leyendo... o que deseen sustraerse de la tensión que el tránsito céntrico puede provocar en una metrópolis. Es decir, la mayoría.
¿Qué otras ideas serían buenas y posibles para promover la lectura? Lugares de vacaciones, medios de transporte, situaciones de tiempos vacíos... ¿en qué momento podríamos disfrutar de que nos acerquen un buen libro? Lo pensamos aquí.
Que hayan tenido un gran comienzo de año y hasta el próximo boletín.
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El Evangelio de Nietzsche (El Tercer Testamento) de Alberto Tocunaga Ortiz
El Anticristo, libro de Nietzsche, inspira la novela El Evangelio de Nietzsche. Pero no se trata de una obra de rechazo a Jesús; por el contrario, le merece un respeto que pocos conocen. No existe burla destinada a denigrar a Jesús. Se trata de una lucha frontal contra aquellas religiones que a partir de la llamada resurrección de Cristo, se han valido para sojuzgar a los creyentes, pero con amenazas y mentiras. Todo es pecado; así, el sexo es pecado cuando se practica fuera del matrimonio de una u otra iglesia cristiana, sea católica o de protestantes. Unos y otros se pueden señalar que están en pecado por ser fornicadores porque lo hacen fuera de su matrimonio religioso. Por eso, las uniones entre varones y mujeres han aumentado, pues, aunque estén en alguna de esas iglesias, no les convence contraer matrimonio, como sí les interesa contraer matrimonio civil. Puede decirse que estos “fornicadores” no le temen a Dios. Y no le temen porque Dios no le puede entregar al ser humano un instrumento para pecar. La novela El Evangelio de Nietzsche no solo sigue al libro de Nietzsche El Anticristo, sino que se basa en determinados versículos de la Biblia y los comentarios que los teólogos del catolicismo hacen, como es el caso de la Resurrección, cuando en la Biblia, Ediciones Paulinas, dicen refiriéndose al cielo: “Sabemos, en realidad, que el cielo no está ni arriba ni abajo, y que no se puede ubicar en nuestro universo material: Jesús está en ese centro espiritual desde donde Dios dirige la historia del mundo”.
El protagonista de la novela sostiene lo mismo cuando dice que Jesús no resucitó en cuerpo, sino en espíritu. ¿Qué haría Jesús con su cuerpo en un mundo espiritual donde no se cumplen las funciones fisiológicas? ¿En qué mella la creencia de un cristiano si Jesús resucitó solo en espíritu? Al parecer, en nada. Pero, más “útil” para los religiosos es hacerles creer que resucitó en cuerpo y de allí saltan a la creencia en el infierno donde los cuerpos se queman en el fuego eterno. Estos y muchos otros misterios son revelados en la novela, donde no por ser ficción deja de ir de mano con la veracidad.
Esta obra, entre otros personajes, tiene un cura obstinado, un ex seminarista, un director de cine, un actor; todos ellos con sus vidas acompañan al protagonista en sorprendentes secuencias, donde traiciones, corruptelas, políticos, romances y pasiones no están ausentes.
Caminos polvorientos de la Mesta de Cecilio García de Blas Martín MaestroEs una historia de Castilla en el siglo XIV, cuando la Mesta era la institución más poderosa del reino. Un caballero de poco rango realiza un viaje a caballo desde Toledo a Sevilla; en esta fábula, el protagonista va narrando sus peripecias del día a día de lo que encontraba por los caminos de la Mesta. Después de la reconquista del centro de Castilla, la Mesta era un terreno fronterizo con muchos peligros y de difícil acceso; en este tiempo, el protagonista realiza un viaje a caballo desde Toledo hasta Sevilla. Él mismo narra todo lo que le va sucediendo: va dando notas de los lugares por los que pasa, la gente que encuentra, las costumbres, la gastronomía, los oficios, los encuentros amorosos en las ventas, los peligros que a menudo enfrenta y, ante todo, la historia de todas las poblaciones del camino. Recientemente, la revista Aquí Digital le ha hecho una entrevista al autor, donde comenta, entre otras cuestiones, el origen de esta obra:
"Mi propósito siempre fue poder comunicar los ya casi olvidados relatos de la Mesta. El protagonista casi no tiene la importancia merecida, es casi un tipo pasivo que va discurriendo en la historia", añade. "He tratado de documentar las hazañas cotidianas de alguien que muy bien podía haber existido. Me he inventado algunas anécdotas cómicas y picarescas usando un lenguaje vulgar y cotidiano. Muchas de las frases que utilizo son de la cultura rural castellana". La nota completa, aquí.
Cecilio García de Blas Martín-Maestro nació en el seno de una familia castellana, en la España rural y pobre de los 50. Vivió en Toledo y en la periferia de Madrid hasta que sus padres emigraron a Australia cuando tenía 15 años. Allí permaneció hasta el presente, aunque a lo largo de su vida intentó regresar a España en distintas ocasiones.
Lleva casado 32 años y tiene cinco hijos, algunos ya casados y también con hijos. Siempre ha trabajado de joyero y ahora es profesor de formación profesional en el módulo de la técnica de la joyería para el Departamento de Educacion de Australia. No está nada mal si, como el autor recuerda, se tiene en cuenta que su primer oficio fue el de pastor (y no exactamente de almas).
Aforismos y sentencias de HipócratesUna lectura ineludible para todos los interesados en la historia de las ciencias de la salud. El juramento hipocrático, la concepción de Hipócrates sobre la enfermedad y su minuciosa descripción de los casos ofrecen una amena ilustración de la medicina de su época. Mejor que cualquier crónica, los relatos de los procesos de salud-enfermedad que este estudioso realiza de sus numerosos pacientes revelan muchas de las nociones fundantes de las ciencias médicas. Ideal para interesados en la medicina y en la antigüedad clásica en general.
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